jueves

Tonolec - Tonolec

Unión de Músicos Independientes - 2005


De algún modo hay que hacer referencia a lo que se hace. Tonolec, se presenta como una banda de fusión de música electrónica con música de la comunidad toba, pueblo originario del noreste de Argentina. Sin embargo en esa denominación se pierde (como en todo lo que se nombra) la verdadera dimensión de la riqueza de este más que interesante dúo. Mixtura, urdimbre, cruce, identidad, raíces, intimidad, tradición son algunos de los concpetos que la palabra fusión no llega a explicitar y que están presentes en los 10 temas que componen el disco. El uso de instrumentos nativos en conjunto con las herramientas electrónicas ensamblan tan bien como el castellano y el toba, como los rastros del dance o el trip-hop con los cantos tradicionales de la etnia toba. Sumarle una segunda lectura posible: las referencias a la dominación que sojuzgo a los pueblos originarios de América puede ser escuchada como una clara posición en relación a otras formas de dominación, entre ellas, la amorosa.


Collective Soul - Collective Soul

Atlantic - 1995


El segundo álbum de la banda de Ed Roland es un punto de inflexión: es, a todas luces y contradiciendo a la cronología, el verdadero debut de Collective Soul como banda y un compendio sonoro en el que se refleja la historia nada fácil de su líder con la música: hijo de un fanático predicador que prohibió la escucha de música en su casa -sobre todo la endemoniada música moderna-, tuvo que fugarse de su hogar para poder construir su formación como músico. Esa huida (asi una esperable actitud rocker) y su formación como guitarrista, sumada al oportuno descubrimiento de un disco de Elton John, a las incursiones televisivas de Elvis, a la música que se filtraba a la prohibición paterna y al ascenso, éxito y declive del grunge de la mano de Nirvana & Cía posibilitaron este crisol de influencias, este vitreaux sónico, el potente collage que es el disco homónimo a la banda, de agitados riffs de guitarra y pegadizas melodías impensadas para el dejo hardcore que queda, como rastro, en el paladar del degustante.


viernes

David Sylvian - Dead Bees on a Cake

Virgin Records - 1999


En este disco de Sylvian, esperado durante más de una década, coinciden varios aspectos extramusicales que contribuyen a ahondar la marcada diferencia de opiniones al intentar ponderarlo: su cresta de la ola amorosa con Ingrid Chávez; una complicada colaboración musical con su amigo Ryuichi Sakamoto; el encuentro con la supuesta santa hindú, Shree Maa, cuya voz incluye en el tema Praise; y el punto final de su relación comercial con Virgin. Si el disco no contara con una tremenda producción y una contundente compañía de músicos consagrados (Bill Frisell, Sakamoto, Talvin Singh, Marc Ribot, su propia esposa); Dead Bees on a Cake no sería tan cuestionado y quedaría su esencia: un dechado de hermosas melodías, de búsquedas y experimentaciones y nuevas puertas hasta entonces no abiertas; íntimo y universal como pretende el budismo que lo desborda. Si la coincidencia de un delicado gusto musical y un hecho artístico con el éxito comercial y la producción de lujo es pecado, pues... ¡pequemos más seguido, hermanos!